Te deseo infiel

La hermana de Anahí, Bertha, se casa, me ha invitado al evento más importante que le puede ocurrir a una mujer después de sus quince años, esta contenta y yo extrañado pues Anahí no me ha invitado... bueno era lógico por dos cosas, Bertha es la novia y ella misma, ha ido hasta mi trabajo y ha dejado su parte matrimonial, es decir cuento con su consentimiento para ir a su boda, por otro lado Anahí no me invitó porque supongo que no quiere verme ahí y no es porque este enfadada conmigo sino, porque... soy su amante.

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Anahí lleva tiempo viéndome a escondidas, Bertha ni siquiera sospecha que su hermana se pierde conmigo y es sabido en su familia que tiene un novio consentido, Bertha me quiere como a un hermano, jamás se le ocurriría pensar que este hermano postizo mantiene una encerrona "incestuosa" con su hermana.

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Durante la semana previa a la boda trate de comunicarme con Anahí, ella no me contesta y pienso que es porque anda con los mil y un detalles que conlleva realizar un matrimonio, la imagino andando con su hermana por todas las galerías y tiendas de ropa buscando el vestido que vaya de acuerdo con los zapatos y la cartera, y los aretes que hagan juego con no se que.

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Un correo de Bertha que me re invita a la ceremonia y la suplica de mi asistencia, yo le respondo confirmándole mi presencia, falta pocos días y tendré que desempolvar el terno negro, lo mando a la lavandería y salgo de compras en busca de una camisa que me entalle, una corbata elegante y unos zapatos de suela de goma para no resbalar.

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- Hola (me dice Anahí por teléfono)
- Hola, ¿como estas? ¿Qué ha sido de ti?
- Bien ultimando detalles con lo de mi hermana, tu sabes.
- Si me lo imagine ¿y que tal esta quedando todo?
- Bien todo bien felizmente… quería pedirte un favor y espero me sepas comprender.
- Claro… como siempre, que sucede.
- No lo tomes a mal ya pero… no quiero que vayas a la boda.
- Aja, entiendo.
- Tu sabes, va a estar ahí toda mi familia y bueno.
- Si, si… te entiendo perfectamente, pero tu hermana me ha dado una invitación y no me gustaría defraudarla.
- ¿! Eso hizo!?
- Bueno si
Un prolongado silencio y se despide con un beso y un “me haces falta” que me reflejaba todo su afecto, amor y deseo por mi.

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Bertha me llama al día siguiente al trabajo recriminándome que porque no podía ir, solo atine a decirle que asuntos de trabajo y ella se burlo.

- jajaja no saben mentir, Anahí dice que tu hijo esta enfermo y que no podrás ir por eso, ¿Por qué conspiran contra mi boda?.

Trate de mantener la mentira pero no pude, quizás con la intención de que sepa de que iría a su dichosa boda con tal de ver a su hermana.

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Bertha me vuelve a llamar desde la peluquería, se esta haciendo un peinado para la noche, faltan pocas horas y estoy dispuesto a ir, al fin y al cabo Anahí sabe que es por ella que voy.

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Llego tarde a la iglesia, los novios están frente al sacerdote, busco donde sentarme, Anahí me ve a lo lejos en el otro extremo del templo, me sonríe y me hace una mueca por la hora, toma del brazo a alguien que esta a su lado, a quien no distingo, pero lógicamente se que se trata de su enamorado.

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La ceremonia es emotiva, los familiares de los novios se toman las fotos de rigor, Bertha me ve a lo lejos y me llama para que acompañe en la foto, saco el celular y finjo una llamada urgente evitando así la placa fotográfica.

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Anahí sigue tomada del brazo de su enamorado, lo toma de la mano y salen juntos tirando arroz a los novios que avanzan hacia la limosina, Anahí me mira de reojo, sabe y siente que la estoy mirando, enciendo un cigarro, Anahí me mira de vez en cuando, cada vez que su enamorado deja de hablarle o tira entusiasta el arroz empuñado en la mano, le habla algo al oído, ella sonríe sin inmutarse, le da un beso en la mejilla, le demuestra que lo quiere, su madre se acerca a ellos junto con otras señoras que me imagino son sus parientes, Anahí las saluda y las abraza como si no se vieran de tiempo, saludan al enamorado que se ve acorralado porque la familia quiere ver a Anahí vestida de blanco, ella sonríe, acepta el comentario que más parece una broma, su madre dice que muy pronto sucederá, su padre le ofrece un cigarro a su posible yerno quien no acepta… la limosina parte, los familiares se disponen a abordar sus respectivos autos, otros van en taxi, Anahí me mira de reojo, sube al auto de su enamorado, su padre y su madre van con ellos, me mira, sabe que voy a ir a la recepción.

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Enciendo el auto, la radio se enciende al instante y manejo con la parsimonia de planificar como sacarla de ahí, esa noche estaba linda, esa noche la deseaba, con un vestido de gala escotado en la espalda, un sencillo arreglo en el pelo, su piel morena brillaba como bronceada, un maquillaje ligero no muy recargado y su manera de actuar sin inmutarse, parecía mostrar que prefería ser así, sin que le importase el resto pues yo era un invitado más, sabia que cuando nos encontrábamos solo éramos ella y yo, encerrados literalmente en nuestro mundo y a pesar de tener los celos incrustados en la mente la prefería así, la prefería infiel, jugando a ser sutíl e inofensiva, pero en nuestra intimidad era tierna y salvaje, guerra y paz, ángel y demonio.

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Llego a la recepción, en la puerta dos vigilantes que buscan mi nombre en la lista de invitados, me hacen pasar, enciendo otro cigarro, busco una mesa preparada para los comensales, cinco tenedores, varias copas y platos, un champagne en su hielera a medio destapar, una botella de vino, un arreglo floral, el mantel blanco y una vela encendida, dos chicas se acercan a pedirme fósforo, me sonríen coquetas, coqueteo con ellas, les ofrezco champagne, ellas aceptan, conversamos, Anahí me mira a lo lejos, esta incomoda, se acerca, saluda a las chicas que resultaron ser sus primas, inventa una excusa sobre unos chicos que vinieron y salen emocionadas, esta celosa, me mira como queriéndome golpear, le soy irónico y ella no tolera eso sin embargo sonríe, su enamorado se acerca, me mira de mala manera, ella sin embargo no me prevee de nada y nos presenta, nos damos la mano y él sonríe sin preocupación, Anahí le ha dicho que soy su primo… su primo gay del que le habla, la miro asombrado, admiro su astucia, porque así no sospecharía de que la amo en secreto, aunque tengo que asumir ciertas posturas femeninas que provoca leves sonrisa de parte de Anahí.

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La noche transcurre, todos se están divirtiendo, el juego de bouquet se lo había llevado Anahí, los más contentos eran sus padres, curiosamente la liga de la novia había ido a parar a mis brazos cruzados y sin importancia, por otro lado su enamorado (quien ha bebido algo de más) me ha hecho bromas de doble sentido referente a los gays (ahora si los entiendo) Anahí parece arrepentirse por haber manipulado mi masculinidad, pero lo resuelvo estoicamente, se sienta y empieza a cabecear y dormirse, aprovecho la oportunidad de bailar con Anahí que me sonríe coqueta, diciéndonos intimidades al oido y en voz baja, le digo que quiero hacerle el amor, que quiero arrancarle el vestido, que quiero poseerla en algun rincón de la recepción, ella me dice sonriente que estoy loco.

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Conversábamos con los recién casados cuando un estrepitoso ruido alarmaba al salón, su enamorado se había caído de la silla, no sin antes sujetarse del escote de una señora que conversaba alegremente a su lado, desatándose un conato de bronca... furioso él, se defiende tambaleándose, Anahí me mira y corro a sujetarlo, lo ayudo a sentarse nuevamente, mientras que el esposo de la señora agraviada lo amenaza con partirle la cara, él se percata de mi presencia y afemina su voz, le digo que lo llevare a su casa, Anahí le ruega que este tranquilo y nos apresuramos en llevarlo, lo subo a mi carro y mientras manejo pienso que por tan bochornoso momento Anahí no querrá aventurarse a pasar el resto de la noche conmigo, llegamos hasta la casa del fulano, lo ayudo a bajar, saca sus llaves y se despide de nosotros.
- Llévala tranquilo (me dice)
- Te la cuidare así que descuida
- No me preocupo, se que me la cuidarás... porque tú eres plancha quemada.
Y se carcajea escandalosamente, observamos que entre bien a su casa, manejo con cuidado, no me atrevo a decirle que la deseo, debe de estar furiosa con su enamorado... cuando en un semaforo me mira, me besa y me dice.
- ¿Que me decías mientras bailábamos?
Y nos fuimos por ahí.

Carta de un suicida

Antes que nada quiero decirles que disfrute los gratos momentos con ustedes, que nunca lo olvidare y que quizás he decepcionado a muchas personas, espero puedan perdonarme.
Eran sus primeras palabras en una carta comunitaria, Juan Manuel siempre decía que era flojo para escribir y con esa carta confirmaba su aburrida paciencia para hacerlo; incluso para dedicarle unas palabras a Mayra.

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Quiero que reúnas a todos en tu casa, esa casa que nos vio divertirnos casi todos los sábados y nuestros viernes de borracheras interminables, te agradezco que seas como un hermano para mi y que hallas abierto las puertas de tu casa y que hallas aportado a creer en la amistad inmensa.
Dile a Ernesto que a veces lo he tratado de idiota pero sabes o sabemos que no, que tiene un problema existencial muy fuerte, jaja es joda y tu lo sabes, pero dile que lo estimo mucho, que he aprendido de su infantilismo y su necedad, que ha sido y será un hermano menor.
Dile a Jurek que será mi amigo siempre a pesar de que hemos tenido ciertas discrepancias con él pero que después de todos hemos seguido compartiendo cervezas en cantidades industriales y confesado muchos secretos que se quedaran ahí.
A Paulina que siempre fue una chica estupenda, algo creída y arrogante pero linda al fin, a Tatiana que la estimo mucho, que antes fue un querer pero que ese querer se desvaneció con el tiempo y las cosas que sucedieron con ella quedaran en el olvido y punto.
Roberto no es mi amigo, ya te lo dije, pero hazle saber de que no le tengo algún rencor o algo similar, tampoco le tengo envidia como él piensa, que tendría que envidiarle a ese idiota, en fin, si lo dice por que esta con la buenota de Helen pues dile que ya paso por control de calidad.
A Gloria que siempre me gusto, se que te sorprende, porque nunca hemos hablado de ella pero empezó a gustarme después de lo que paso con Tatiana, son amigas intimas pero así es cuando los gustos cambian y los sentimientos nacen.
Ursula también tiene su lado bueno otra vez te sorprendo pero si te das cuenta y la miramos con paciencia te darás cuenta que tiene algo que es un no se que, que la hace especial.
Hazme otro favor dile a Miriam que mis días con ella fueron las mejores y que me perdone por no haber sido el hombre que ella espero y que nunca me acosté con su amiga, que fue una estrategia cobarde para terminar con ella, sin embargo me he dado cuenta que siempre fue una mujer entregada y dedicada a que la relación germine y crezca pareja.
El número telefónico es de una chica de la que siempre te hable, llámala y cuéntale, dile que las noches con ella nunca dejaron de ser intensas y cada días que nos veíamos a escondidas eran las más esperadas, cuéntale que ella era mi prototipo de mujer exacta y que siempre me sentí enamorado de ella, pero que preferimos mantener esa infidelidad de la que hemos sido protagonistas para no perder ese entusiasmo de amarnos sin tapujos y tabúes.
Te cuento que acompañe a Maritza a su casa el sábado creo que le gusto pero me trata de soslayo y casi severa, como dice mi jefe quizás me esta haciendo sufrir si la vez, dile que ya no es necesario.
Se que todo esto te parece extraño pero en estos días han pasado algunas cosas en mi vida que no tienen un revés, pasan por todos los aspectos, sentimentales, laborales, sociales, de todo.
El sábado fue nuestra última borrachera, y se que no me lo perdonaras y mucho menos entenderás, yo tampoco sabría como explicártelo, se que nos hemos contado casi todo y que al menos yo he sido siempre transparente contigo por la amistad que te tengo y así quedara.
Gracias por ser mi amigo y el hermano que nunca tuve.

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Juan Manuel se dio un tiro días después por una fuerte depresión, nadie entendió porque.

Ellas

- Alo
- Quiero hacerte una pregunta
- Nicole son las 3 de la mañana
- Es que es urgente… porfa, siempre me dijiste que podía contar contigo
- Si pero a las 3 de la mañana, tengo que trabajar temprano
- No seas así
- Bueno tiene que ser urgente, te escucho…
- Quiero que seas sincero conmigo ¿si?
- Si si si, ya dime que me duermo
- Bien… ¿estoy gorda?
- ¿Que?... ay ¿para eso me llamas a las 3 de mañana? ¿Eso es tan urgente?
- Ya pues dime…
Nicole tiene una urgente obsesión por su físico y la verdad no esta gorda, suele compararse con su hermana de 17 años que esta más buena que el pan, tiene un cuerpo divino, propio de las chicas de su edad, Nicole tiene 24 y aún que sabe que es toda una mujer se acompleja por su contextura, tiene lindos pechos y unas piernas bien torneadas, le he dicho millones de veces que me gusta sus piernas y aunque se sonroja estoy empezando a creer que no me cree.

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- Tengo un dolor en el tobillo que no me deja caminar ¿Cuándo salgamos me cargas si? Porque no creo que me dejes bajar sola y sin ayuda.
- Y a que se debe ese dolor
- No se… mira
Lucia me enseña su tobillo, en si… sus piernas y bueno… parte de sus muslos, usa una minifalda negra, los chicos del trabajo le han echado el ojo, es simpática, sexy, sensual, han alucinado con ella de una manera poco delicada y no es para menos, Lucia tiene una forma de caminar muy coqueta y el vaivén de sus caderas perturban hasta los vigilantes y limpiadores, tiene una cintura fina pues todo su cuerpo es sometido a rigurosos ejercicios todas las noches en un gimnasio cerca al trabajo, las chicas hablan mal de ella y todos los lunes corre el rumor de que durmió con alguien el fin de semana, pero Lucia no es así… nunca le molesta lo que dicen de ella, lo toma con cierto humor e ironía, muy por el contrario a Nicole admira su cuerpo, sabe lo que tiene.
Me mira con coquetería, siempre insinúa algo, me sonríe y siempre me sale con que nunca entiendo lo que ella dice, cada vez que puede, que es casi siempre, se acerca a mi escritorio y juguetea con mi pelo, alaba mis ojos y mis gestos, se sienta en el borde del escritorio y termina por mostrarme más de lo normal, los demás me miran esperando alguna reacción, pero me obnubila con su presencia y siento que no es justo.
Una noche, o casualidad, se le perdió las llaves del carro, tuve que llevarla hasta su departamento y lo demás… es historia.

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- Eres un idiota, no quiero volver a verte eres un infeliz, porque me haces esto
Es Vanessa que me ha dejado un mensaje de voz en el teléfono, me ha dicho más cosas ofensivas, esta dolida, siempre esta dolida, siente muy en el fondo que nadie la quiere, y creo que se trata de una leve esquizofrenia o peor aún un egoísmo crónico, cuando aún hablabamos y nos llevábamos bien me contaba sus cosas y a veces compartía las mías, digo a veces porque al mínimo de alguna discusión terminaba por sacármelo en cara hasta que decidimos cortar la relación por mutuo acuerdo, tenia reacciones bruscas, a mis amistades las veía de soslayo y casi nadie le caía bien, cometió el error de prohibirme salir a una reunión de camaradería con los compañeros del trabajo, oso amenazarme con dejarme si lo hacia… preferí que el destino la juzgue… esa noche me divertí como nunca.

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- Crees que le guste
- No lo se… has intentado averiguarlo
- No como se te ocurre… que va a pensar de mí después… además no creo que le guste
- Pues si te ha llamado varias veces y te a invitado a salir pues es por algo
- No, son cosas mías
- Creo que deberías aceptar esa invitación
- No
Tatiana esta enamorada de Roberto, es una situación reciproca, pero tengo la intuición de que Tatiana se hace un mundo o más bien complica al mundo.
Roberto la ha llamado varias veces y me ha confesado que esta enamorado de Tatiana, pero esta fémina termina por mandarlo a rodar de manera inquisidora, él insiste o insistió, hasta el día de la bofetada… Tatiana le pego delante de medio mundo en una discoteca, fue un accidente múltiple, ella resbalo y Roberto que venía detrás de ella solo atino a sujetarla por la cintura antes que cayera sentada al piso húmedo, nadie se percato pero al cojerla la inercia hizo que se deslizara de sus brazos y Roberto le tomo un seno como si fuera a rescatar el busto exactamente, Tatiana se repuso y sacasonapa.
Roberto le pidió disculpas durante dos semanas hasta que ella entendió por obra y gracia de sus amigas, que sabían, que fue un accidente… y como era lógico nadie dejaba de reír al recordar tan bochornoso incidente.
A partir de ahí Tatiana se fijo más en Roberto, sin embargo ella seguia teniendo esa actitud agresiva y a veces intolerante con él... Rebeca le decía que como podía ser tan tolerante con ella, él refutaba su amor, Rebeca le hacia entrar en razón “ningún hombre puede soportar tantas humillaciones ¿que acaso no tienes orgullo?” Roberto decidió alejarse de Tatiana.
Tiempo después Tatiana va a mi casa y desconsolada me pide que la aconseje, trato de calmarla pero es imposible… Roberto esta con Rebeca.

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- Alo
- Alo… ¿Quién es?
- Como que quien es…
- Bueno… disculpa es que no te reconozco…
- O sea… eres igual que todos y yo que quería verte
Patricia no me llama hace mucho, bueno tampoco la he llamado, hemos sido unos ingratos, no nos vemos hace tres meses, la última vez que nos vimos peleamos en el cuarto de un hotel, ella intentaba suicidarse por problemas en su casa, me dice que yo tuve la culpa porque mi primer escrito se trataba de eso y quería solucionar todos sus problemas saturándose de pastillas, logre disuadirla y terminamos en la cama.
Patricia quiere que nos veamos hoy pero no puedo, algunas cosas del trabajo me impide, ella cree que es mala en la cama y no es tanto así… solo que empezó a ser algo metódica, me cuenta de las poses que vio en un dvd pornográfico, tiene un libro sobre el kamasutra y cosas ligadas a ese asunto… quiere grabar un video y examinarse para saber como va su progreso… esta loca… pero es una locura dulce y simpática.
Patty me ha llamado porque quiere hablar conmigo pero ha traído una cámara filmadora casera, busca una película pornográfica en el circuito cerrado del hotel y me da las indicaciones a seguir, no puedo contener la risa y se siente ofendida... siento que la he ridiculizado y aunque me parezca ridículo… experimento con ella esa sensación de verme en televisión.
Al término de mi debut cinematográfico me regala la cinta:
- Es para que la próxima vez que te llame recuerdes quien soy (me dice)

- Claro mi actriz porno favorita. (Le contesto)