Un retrato al carboncillo de una mujer desconocida que
nace de una canción, camina y sonríe, pulula y vive en mi imaginación… deambula
su imagen viviente a medianoche en mi habitación y ha abierto en mí una extraña
esperanza de tenerme siempre en constante contemplación.
Una mujer así es celosa en término medio porque mira a
las demás con la seguridad de que le pertenezco; una mujer así no se hace
problemas con amores pasados y vive mi presente (nuestro presente) con
intensidad; una mujer así mantiene nuestra privacidad sin necesidad del
Facebook o whatsapp, de un twitter o un instagram; una mujer así me demuestra
que me ama sin necesidad de la contraseña del email, ni rebusca mis conversaciones
en el celular… una mujer así me enseña sin querer el sentido de la confianza.
Soy para sus pretendientes el mejor hombre del mundo y
usa una sortija fingiendo que es de compromiso, es severa a los comentarios
contra mí y asegura ser nuestro problema donde los terceros salen sobrando… una
mujer así comparte conmigo un café a la salida del trabajo, comparte mi afición
por el cine, la música y las pastas… bromea con mi sobrepeso y me apacigua con
un beso engriendo el momento… una mujer así me sorprende un domingo con un
almuerzo hecho por ella aunque le cueste cocinar, me obsequia algo de mi
interés con cierto atino.
Y aunque pueda haber momentos de tensión y discrepancia
como cualquier pareja y detestaría verla llorar; para una mujer así no hay
culpables entre los dos y cerramos el tema con una intensa reconciliación.
Una mujer así modela frente al espejo, desfilando sus
innumerables vestidos hasta sentirse reina; una mujer así pregunta y repregunta
si se ve bien, ella me acomoda la corbata y me critica con amor si no estoy
bien vestido; una mujer así baila coqueta y libre, segura de sí; es mi hincha
desde las tribunas junto con las novias o esposas (o amantes) de mis amigos
peloteros y se disfraza de comentarista deportiva para hacerme reír…
Una mujer así tiene iniciativas amatorias, sus palabras
al oído y ese beso en la ducha; en ese espacio para dos no existen los tapujos;
una mujer así rompe los esquemas en la cama, ella no busca satisfacciones banales,
ella quiere que sienta su piel como mía, ella no quiere hacerme el amor, ella
quiere darle otro nombre al momento, ella quiere ser feliz a mi lado.
Una mujer así tiene un corazón lleno de emociones capaz
de darle un sentido particular a la vida… mi vida; una mujer así tiene un juego
de miradas para develarte su alma y un millar de besos que reparte en mi sin
merecerlo; una mujer así tiene un sueño en mente que nunca me dirá pero que
quiere que forme parte.
Una mujer así mira las estrellas a la mitad de la carretera
en medio de una noche oscura, me regala un beso, suspira y sonríe, “vuelvo
pronto” me dice y desaparece en la oscuridad inmensa de ese desierto a donde no
sé cómo llegue… su rostro me da paz y la invito a ser mi musa… ella a lo lejos sonríe
y me deja sin saber su respuesta… y vuelvo a creer que una mujer así no existe.