miércoles, marzo 04, 2009

Día de playa

Los veranos no son mi fuerte, tengo un mal recuerdo de mi último verano, tras una avezada maniobra surfística el mar me arrastro al centro de sus devoradoras aguas, casi sin darme cuenta, fue entonces que me quede, literalmente, sin piso y empecé patalear recordando las lecciones de natación aprendidas durante mi infancia en las vacaciones inútiles de algún verano perdido, lecciones que me sirvieron más para apresurar mi desesperación por no hundirme y morir atragantado por cantidades navegables de agua salada, pero una mano salvadora me saco de mi breve agonía marítima y salvo mi vida devolviéndome a mi hábitat natural… jamás había amado la tierra como en aquella oportunidad.
<<0>>
Desde ahí mantuve al mar alejado de mi, los veranos pasaron y las mañanas tostándome bajo el sol las cambie por sanos partidos de fulbito, días de camping, piscina, carne en el asador; preferí ahogarme en cantidades industriales de cerveza antes de tener un pie metido en el mar, noches de salsa y son montuno; eventos y festividades que se fueron dando durante los últimos ocho años alejándome del mar esperando que se olvide de mi, que halla olvidado alguna rencilla conmigo y pretenda llevarme a sus profundidades.
<<0>>
Sin embargo este año decidí “reconciliarme” con la majestuosidad del temerario e infinito mar, los fines de semana volví a pisar arena firme y enfrentarme, amistosamente claro, a las inmensas olas de La Herradura y ensayar alguna destreza surfística, o pensar echado en su ya escasa arena, conversar con un par de cervezas bien heladas de por medio, un fresco y suculento plato de ceviche y finalizar con un helado que amengüe el calor, creo que he superado el temor y podría volver al mar el año entrante.
<<0>>
Fabián y Yolanda, recién casados han rentado una casa de playa al sur de Lima, no los veo desde que se casaron y ellos han aprovechado unos días para reencontrarse con los amigos y les pareció buena idea reunirnos a todos en una casa a orillas del mar, el verano esta por terminar y seria una buena oportunidad de alejarnos de la ciudad, el proyecto esta en camino y le aseguro a la pareja que iré de todas maneras.
<<0>>
Una semana previa había recibido las llamadas de Fito confirmándome del evento este, Lucia y Giovanna también, Adriana se gasto su saldo enviándome mensajes de texto, Carlos, Manuel, Alonso, Cheche y Pololo están armando un equipito para pichanguear, Papo me recuerda que no olvide los cigarros, mientras que El Gordo me ha pedido una colaboración para comprar cerveza “una caja por cabeza tío…” me dice, todos están esperando la fecha del último día de verano y reencontrarse con los amigos.
<<0>>
En el último día de verano todos esperan en casa de Matías, una combi aguarda en la puerta; en realidad me están esperando, un vapuleo general me recibe y a trote subo a la móvil, los amigos me reciben con un apanado que causa jocosidad, una sarta de bromas y chistes se genera durante el trayecto, mientras que las chicas están en una tertulia de chismes, modas y dietas… La combi se desplaza sin contratiempo por la panamericana sur hasta Cerro Azul, un enorme bungalow nos espera.
<<0>>
Carne a la parrilla con chorizo, hot dog, hamburguesas, salsas al gusto, cervezas y gaseosas empezaron a repartirse en la tarde después de jugar voley con las chicas y el fulbito con rotundo marcador de 6 a 4 para el sexteto de siempre, nos hemos metido al mar a surfear domando las olas, Fabián y Yolanda nos ha asegurado que podemos quedarnos tenían pensado hacer una pequeña reunión, no seria mala idea hacer una fiestita, el entusiasmo crece y el último día de verano parece ser el mejor.
<<0>>
El sol alumbra al fondo pintando el cielo como una obra de arte del mismo Dios, Jimena ha venido muy linda hoy, esta algo triste y bajoneada por un mal amor no correspondido, sabe que la pretendo a escondidas en nuestras conversaciones por el messenger, palabras que no me atrevo a decirle en persona y ella igual, sin embargo ella me acompaña en la terraza mientras veo el ocaso, me trae una botella de cerveza personal y yo le invito un cigarro, admiramos juntos el atardecer “¿te inspira a escribir no?” me dice y me sonríe coqueta, le aseguro que si, conversamos largo y tendido mientras los demás bailotean de lo lindo.
<<0>>
La noche se va acercando, Jimena y yo seguimos conversando “Así que te casas ¿no?” me dice, confundido no caigo en la cuenta que se refiere a mi anterior escrito nos reímos juntos y el tema de pareja cae por su propio peso, Jimena esta sola y yo ando en una incertidumbre de creer y no en el amor, no hemos hablado de nosotros porque creemos que la amistad que tenemos no se deba romper y creo que es mejor así, nos hemos contado muchas cosas, de las relaciones de pareja y también de las sexuales, siento un cierto gusto por ella y una extraña provocación deseosa; la noche se va haciendo propicia, nos hablamos con cierto coqueteo y nos acercamos poco a poco, hablamos de tener una aventura alrededor de la playa y de hacernos el amor en el mar, nos reímos porque suena jocoso y alocado, pero me mira con ciertas ganas y creo que ella también lo percibe de mi.
<<0>>
Yolanda esta buscándonos, todos están bailando y divirtiéndose, pregunta por nosotros, Fabián no sabe donde estamos, las chicas también no saben nada de Jimena, es entonces que la especulación corre por la sala, pero Jimena y yo caminamos por la playa con cigarros de por medio y cerveza hurtada del frío bar de la casa de Fabián, caminamos en la penumbra de la playa y me cuenta parte de su amorosa vida, esta desilusionada del amor y no quiere confiar más… tras un paseo largo Jimena y yo terminamos besándonos y riéndonos de lo que ocurría.
<<0>>
Yolanda y Fabián nos ven a lo lejos y son testigos de este breve romance, Jimena me pide no contárselo a nadie, me vuelve a besar, entramos a la reunión y somos participes de la fiesta que no se sabe en que terminara… estoy seguro que el año entrante querré reconciliarme con el verano definitivamente.

1 comentario:

Anónimo dijo...

siempre he kerido q vayamos a la playa ... no se dio asi :(

K